El piloto de Tandil ratificó que lo hecho en su ciudad no fe casualidad, su unidad nuevamente se mostró competitiva y fue uno de los grandes animadores que tuvo el TC del 40 en la cuarta fecha del año. Por diversos inconvenientes no pudo concretar un buen resultado, “Estoy contento por el rendimiento del auto pero la suerte nos jugó en contra y no pudimos plasmar con un resultado el funcionamiento del auto. El sábado pude quedarme con el “uno” en la clasificación. Fue muy apretada con Valentín y Rubén, demostrando la paridad que hay en la categoría. En la última vuelta tuvimos un problema con un disco de frenos, por eso el domingo salimos a asentar frenso y nos encontramos con una pista que estaba más rápida y en la única intento de vuelta hicieron un trompo adelante mío y tuve que levantar”, contó el piloto serrano.
 

Andrés Gallego maniobrando para ingresar a la recta principal 

En las finales tuvo que trabajar para poder avanzar, finalmente vio la bandera a cuadros en el 5to lugar en ambas finales, “La pista estaba difícil, no te dejaba estirar un frenaje había que ir muy concentrado esperando el error del que iba adelante. En la primera final luego de quedar último se hizo muy difícil avanzar y en la segunda final tuve un problema con el regulador de la presión de nafta y tuve que ir prendiendo y apagando la bomba, pero pude llegar y eso fue importante. Hemos dado un salto con respecto al año pasado, tanto en Tandil como en Dorrego pudimos nadar adelante y quedarnos tranquilos de que no fue casualidad lo que se hizo en la carrera pasada”