Finalizó el paso de Juanjo Ebarlín por el autódromo de Concepción del Uruguay, Entre Ríos, el segundo del año dentro del calendario 2016 del TC, pero esta vez con mejores resultados. El Mago cerró su primera competencia con la motorización de Daniel Berra y se mostró competitivo en la final, en la que estaba para terminar cerca de los 10 mejores pero una maniobra a poco del cierre se lo impidió.

La última jornada de la duodécima fecha de la máxima se puso en marcha con las tres series matutinas y en la primera de ellas estuvo el piloto de Benito Juárez para buscar avanzar en el clasificador. Sin embargo, tras partir 6°, perdió tres posiciones por la falta de grip en el tren trasero que tuvo en la primeras vueltas y quedó 9° en la batería, un resultado que lo depositó en el cajón N° 25 para la largada de la final.

Desde esa ubicación, Juanjo intentó escalar colocaciones y lo pudo hacer gracias al buen rendimiento general del Torino que alista el equipo Donto Racing. En el inicio aprovechó un amontonamiento de autos por un trompo de Gastón Mazzacane para avanzar y figurar 16° en el primer tercio de competencia. De ahí en más se mantuvo firme y veloz para seguir ganando puestos con muy buenas maniobras.

Llegó a estar 13° con 18 giros cumplidos y se encaminaba a terminar muy cerca de los 10 primeros, pero tras pelear la posición con Jonatan Castellano a dos vueltas del cierre, se vio perjudicado por una maniobra de Camilo Echevarría, quien lo dejó sin pista en la entrada a la recta principal y lo obligó a transitar por la parte externa, volviendo retrasado en el 19° lugar. Finalmente, como sancionaron a Echevarría por “maniobra peligrosa”, el Mago quedó 18°.

Así logró su mejor resultado del año y ahora se ubica 30° en el campeonato con 251 puntos. Su próximo compromiso en el TC será los días 28, 29 y 30 del corriente mes en el autódromo de Toay, La Pampa.

Juanjo Ebarlin: “Tuvimos un muy buen domingo por la final. En la serie nos costó mucho en las primeras tres vueltas por falta de grip trasero, después el auto se normalizó pero igualmente perdí mucho y tuvimos que largar atrás en la final. Ahí logramos aprovechar un desparramo en el inicio y después pudimos ir muy fuerte. Considero que manejé el mejor auto del año con un motor que acompañó muy bien; aunque creo que hay que seguir trabajando en el impulsor por lo que pude referenciar en la final. Veníamos en el puesto 13, a dos vueltas del final, y en una maniobra en la que Castellano me pasó y me definió bien la posición, Echevarría se tiró y me dejó totalmente sin pista, ahí es donde nos terminamos de retrasar hasta el resultado final. De todos modos el balance es más que positivo porque pegamos un salto con respecto a carreras anteriores e iremos por más en las últimas carreras del año”.