Necesitaba el triunfo para meterse de lleno en la lucha por la corona y lo consiguió en un fin de semana que se presentaba complicado, pero que el domingo comenzó a revertirse desde la serie, “Veníamos en un fin de semana complicado, teníamos un auto que estaba a 6 o 7 décimas y el sábado no podíamos encontrarle el ritmo. Para el domingo se hicieron unos cambios  y en la clasificación del domingo el auto cambió, si bien el circuito estaba más lento el funcionamiento del auto cambió, el auto me dejaba ir por donde yo quería. En la serie tanteamos a Mariano y vimos que teníamos un poquito más, pero no nos desesperamos. En la final cuando largamos y se tocaron los tres de adelante  y alcanzamos a doblar atrás de Mariano, unas vueltas mas delante lo tanteamos dos o tres veces y lo alcanzamos a pasar. Una vez que quedé adelante  logré  hacer una diferencia y cuando quedó “Juani” (Iribarne) segundo hice dos vueltas rápidas para tratar de mantener la diferencia y cuando vi que no se acercó me mantuve hasta el final”, detalló Rubén.

El panorama por el campeonato cambió, se achico la brecha de puntos pero fundamentalmente se saldó la cuenta de la victoria, “Nos sacamos un gran peso de encima, ahora tenemos la tranquilidad de haber ganado la carrera, hay que seguir trabajando porque  se sienten los kilos, en esta carrera estábamos pasados de lo que teníamos que tener, por eso que para la próxima casi no tendremos que agregarle”, aseguro.
En la segunda final el objetivo era llegar y se cumplió, “En la segunda final queríamos llegar, logramos hacer una buena remontada y terminamos segundos. En la parte final cuidé el auto porque todavía queda mucho por delante y no era necesario gastar el auto”.