El paso de la Minicross por San Cayetano dejó un sabor amargo para Matías Pereyra, piloto de Tres Arroyos, quien compartió su auto con Guillermo Yane en la carrera con invitados. El fin de semana terminó con un fuerte vuelco, que obligó a intensos trabajos en el taller para dejar todo en condiciones.
El fin de semana en San Cayetano no terminó de la mejor manera, en al final de los invitados Guillermo Yane sufrió un vuelco. “Tuvimos un fin de semana complicado, muy duro para nosotros en San Cayetano, estamos trabajando mucho en el auto para recuperarlo. El golpe fue fuerte, afortunadamente a Guillermo no le pasó nada. El auto lo sufrió, fueron varios los elementos que tuvimos que cambiar, si bien la estructura soportó todo muy bien, tuvimos mucho trabajo para recuperarlo”, detalló Matías sobre lo ocurrido.
Hasta ese momento el fin de semana venía con complicaciones, con bastante trabajo para encontrar el funcionamiento indicado, “El fin de semana arrancamos complicados en las pruebas pagas, estaba muy distinto a lo que había sido en Tres Arroyos. Fuimos trabajando mucho, fuimos avanzando, pero siempre por detrás del resto”.
Con el golpe superado y los arreglos en marcha, Pereyra ya piensa en la próxima fecha en su ciudad, clave para cerrar la etapa regular.
“Tenemos que terminar de la mejor manera la etapa regular, tener la victoria te da una tranquilidad extra, queremos sumar fuerte, más allá de que no nos da para ganarla. Tres Arroyos es un circuito que nos gusta por lo que iremos por una buena carrera”, afirmó.